Entrevista

por Orson Peter Carrara

Viviendo y Aprendiendo a Vivir, un libro que valora el progreso humano

Nacido en Botucatu (SP) y actualmente residente en Pirassununga (SP), Raul Franzolin (foto) es médico veterinario y actualmente está jubilado como profesor universitario. Es editor-gestor del GEAE – Grupo de Estudios Avanzados Espíritas, el primer grupo espírita en Internet, fundado el 15 de octubre de 1992. Ha publicado su primer libro, la obra Viviendo y Aprendiendo a Vivir – Una visión espiritual de la vida, lanzado por la Editorial Viseu y está también disponible como libro electrónico, tema central de la siguiente entrevista:


Su libro recientemente lanzado, como lo indicna su título y subtítulo, ¿puede ser considerado como un gran resultado de su propia manera de entender la vida, a la luz del Espiritismo?

Sí, sin lugar a duda, todas las reflexiones que involucran los capítulos abordados surgieron de mi experiencia de vida e intuición inspiradora bajo la visión de las enseñanzas de la Doctrina Espírita codificadas por Allan Kardec.

La división didáctica de la obra en partes que contemplan sus respectivos capítulos muestra su cuidado con diversos aspectos de la experiencia de vivir, yendo desde el propio planeta y sus naturales desgloses – incluyendo el ambiente -, pasando por el conocimiento espírita y entrando en la actual era digital. ¿Cómo fue organizar esto?

El hombre no puede vivir aislado. Incluso en una determinada circunstancia, nunca está solo debido a la existencia del mundo espiritual y a las relaciones que existen entre los mundos visible e invisible. La vida en sociedad es fundamental para la evolución espiritual de cada ser, contribuyendo, en una visión amplia, a la armonía universal.

Con este enfoque en mente, diseñé el libro con el objetivo de enfatizar la importancia de la reflexión constante sobre la vida cotidiana, desde la estructura preparada del multiverso, la Tierra, la vida en la Tierra, la vida en sociedad con sus problemas sociales y ambientales, y vivr con espiritualidad.

La era digital es una fase de la evolución del planeta, como nada antes visto. Se trata del poder de la comunicación al servicio de la humanidad. Sin embargo, al estar la Tierra aún en transición planetaria hacia un mundo mejor, individuos de baja evolución espiritual aprovechan la internet para provocar miedo y daño con su mal uso con estafas, noticias falsas, delitos cibernéticos y tantos males. Pero, al mismo tiempo, la espiritualidad superior tiene un amplio medio para llevar el amor, la fraternidad y la solidaridad al mundo entero.

En todo este contexto, en su opinión, ¿cuál es la mayor contribución del Espiritismo?

Es aquí - en el ambiente digital - donde el Espiritismo tiene su herramienta para contribuir al proyecto Tierra Regenerada, llevando los principios espíritas a aquellos que necesitan apoyo para las actividades en el bien común. El Espiritismo, bien comprendido, estimula el trabajo de vivir con espiritualidad y, a cada momento, surgen nuevos líderes bajo la bandera de la fraternidad universal en favor de la verdadera caridad, que es el ejemplo de vida, concordando con los postulados del Maestro Jesús.

Ante la cantidad de desafíos sociales de la actualidad, ¿podemos considerar la educación como la gran clave para resolver estos grandes problemas sociales que desafían la inteligencia y la sensibilidad humanas? ¿Cómo hacer esto más práctico?

Este es un tema complejo, porque la educación del individuo por sí sola no es suficiente para resolver los problemas sociales, pero sin duda es una acción relevante. La educación refleja la evolución intelectual del Espíritu, sin embargo, sus características morales elevadas promueven acciones directas en la reducción de los conflictos y problemas sociales, en vista de su deseo de fraternidad y solidaridad. En la práctica, el proceso se realiza con la reforma íntima. El primer paso es reflexionar sobre sí mismo frente a su papel en la sociedad.

Es lamentable ver la eclosión de guerras en el siglo XXI. Las obras básicas estudian el tema y señalan la causa. Sin embargo, llevando el tema a un análisis actual, ¿la pregunta sigue siendo la misma? Es decir, ¿sigue prevaleciendo la naturaleza egoísta y equivocada de la interpretación de la vida?

La eclosión de una guerra demuestra, de manera general, el mayor punto de la inferioridad humana, ya que se cobran vidas inocentes. Los conflictos existen en todo momento, desde la divergencia de ideas y palabras, pasando por el desdén, los chismes inútiles, las agresiones verbales y morales, el acoso, la agresión física individual, la agresión física colectiva hasta las guerras sangrientas, que reflejan un mundo aún atrasado en la evolución planetaria.

En verdad, el problema es el mismo en la historia de la vida en la Tierra, pero la evolución espiritual de la humanidad sigue su progreso eternamente. En la actualidad, observamos la indignación y la rebelión de muchos ante cualquier conflicto. Los espíritus con una evolución espiritual superior al promedio continúan reencarnando en gran número, viviendo con espiritualidad desde una edad muy temprana. Eso hace mucha diferencia cada día.

De los numerosos aspectos del arte de vivir, ¿cuál podemos considerar como punto de partida para el equilibrio individual y social?

Frente a la complejidad de la vida, considero que el acto de reflexión sobre la vida espiritual es el punto de inflexión para un cambio fundamental rumbo a la felicidad eterna. Si basamos nuestra vida en la visión de la materia, no encontraremos el equilibrio necesario para una buena vida en sociedad. Sin embargo, el gran desafío es usar la razón y el sentido común a nuestro favor, elevando los pensamientos a regiones mucho más allá de lo que estamos acostumbrados a ver. A partir de entonces, los prejuicios y paradigmas comienzan a desmoronarse.

Este aprendizaje de vivir, especialmente en las relaciones, ¿está logrando hacer madurar a la humanidad?

Creemos que sí, pero es difícil verificar esta madurez en base a la información que tenemos de las noticias en los medios de comunicación. Al ser un mundo económicamente competitivo, el interés es llevar lo que se quiere divulgar a la mayor cantidad de personas posible, recaudando más recursos financieros. Esto coloca en el foco, o más bien enfatiza, lo que más despierta curiosidad e indignación, promoviendo una avalancha de noticias malas y falsas, que encubren las buenas acciones, dando la impresión de que el mundo está en decadencia moral. Sin embargo, la pregunta es si el Espíritu encarnado es de un nivel evolutivo inferior, bueno o elevado para la madurez de la humanidad en el bien común.

Vamos a analizar algo más cercano. Querido lector, piense en una persona que conozca bien, como un pariente cercano o un amigo. Le preguntamos: "¿Sería esta persona capaz de abofetear a alguien, independientemente de la razón de la situación?" Si su respuesta es no, nunca, ella será parte de la humanidad que contribuye a un mundo mejor de alguna manera, ¡y ciertamente no son pocas!

En la vida en sociedad, se destaca uno de los capítulos que se refiere a las leyes, los derechos y deberes. Con tanta falta de respeto e incluso indiferencia a estos parámetros hoy en día, ¿qué podemos hacer para estimular que se preste más atención a estos detalles?

Podemos estimular, por todos los medios, a vivir con espiritualidad. Esto significa que la mejor manera de vivir en sociedad es respetarse unos a otros, respetar las leyes y cumpliendo con sus derechos y deberes. Si una ley puede ser considerada obsoleta y retrógrada, se debe accionar el derecho individual para modificarla por medios legales de manera respetuosa y democrática. Lamentablemente, frente a la inferioridad, se tiene que enfrentar ciertas situaciones difíciles y desafiantes de la relación irrespetuosa.

Es aún más relevante saber que todo lo que se haga indiscriminadamente, perjudicando la convivencia social, implicará un desajuste directo del Espíritu, que continuará desajustado en su jornada evolutiva en el mundo de los Espíritus.

La vida en sociedad se traduce en la observación de innumerables ítems para la armonía y la paz social. Su libro aborda varios puntos que llevan al lector a reflexionar sobre esta ciencia de vivir y sus correspondientes aprendizajes. ¿Qué es lo que más le llama la atención en el contexto general de sus planteamientos?

La vida no es tan simple como la vemos, porque el tiempo que vivimos encarnados no es suficiente para entenderla, esto, considerando una larga jornada natural. Vivir parece ser simple y complejo al mismo tiempo; simple si observamos que el hecho natural —nacer, crecer y morir— se procesa indiscutiblemente, para toda criatura; es complejo si reflexionamos con la espiritualidad, considerando el ciclo: "Nacer, crecer, morir, renacer de nuevo, progresando siempre, tal es la ley".

El libro enfoca la vida en el bien común como un camino mejor a seguir. El bien común significa una vida más feliz para todos, ya sea en un ambiente restringido como la propia familia o más amplio como la humanidad y, más aún, la vida universal.

¿Hay algo más que le gustaría añadir?

El libro tiene como objetivo contribuir a la divulgación de la Doctrina Espírita. Fue redactado con un lenguaje accesible en capítulos cortos que abordan temas relevantes para la vida en sociedad, con el objetivo de llegar a un público objetivo no espírita en busca de un mayor conocimiento y a los espíritas – principiantes o no – como una reflexión que involucra: las características científicas de nuestro planeta Tierra insertado en el multiverso y como refugio de la complejidad de la vida; los principios básicos de la Doctrina Espírita para orientar al lector a la comprensión de su contexto general; la vida en sociedad con acontecimientos notables; la visión de vivir con espiritualidad considerando los mundos terrenal y espiritual, y finalmente la ascensión de la Tierra como un mundo Regenerado.

¿Cómo debe proceder el lector para adquirir su obra?

La obra fue producida por la Editorial Viseu y está siendo comercializada por varias tiendas virtuales en Brasil y en el mundo. Ponemos a disposición de los interesados en conocer y adquirir el libro un espacio en la web del GEAE, con sinopsis, resumen, lugares de venta y opiniones de los lectores. Para acceder haga clic en este LINK

Sus palabras finales.

Deseamos agradecer al notable órgano de difusión del Espiritismo nacional e internacional en la red, O Consolador, en la persona de nuestro amigo Orson Peter Carrara, por haber facilitado este espacio, junto con tantas informaciones sustanciales sobre la Doctrina Espírita, disponibles en su sitio web y en otros similares.

Como vemos, la era digital, de la que también se habla en el libro, no surgió sólo como un simple experimento de comunicación entre dos ordenadores la noche del 29 de octubre de 1969; surgió como un medio de la Divina Providencia para la transformación de la humanidad en un mundo mejor. Concluimos con una frase de Kardec en un célebre discurso pronunciado el 1º de noviembre de 1868: "Que los espíritas sean los primeros en usufructuar los beneficios que trae el Espiritismo, e inauguren entre ellos el reino de la armonía que resplandecerá en las generaciones futuras". 

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita