Entrevista

por Orson Peter Carrara

El impacto del conocimiento espírita en la vida de una persona

Nacido en Ouro Fino (MG), donde también reside, Marcos Venícios Nunes Siqueira (foto), psicólogo clínico, con formación en psicoanálisis y especialización en salud mental y psicología forense, participa, en las lides espíritas, en el CEAP - Centro Espírita Antônio de Pádua y la Casa Espírita Cairbar Schutel, en la que trabaja como expositor y coordinador del ESDE - Estudio Sistematizado de la Doctrina Espírita,  además de desempeñarse como psicólogo en más de tres instituciones de la ciudad.

Para hablarnos de su trabajo en el ámbito espírita, nos concedió la siguiente entrevista:

¿Qué significa el Espiritismo en su vida personal?

El Espiritismo es mi filosofía de vida, porque me llevó a convicciones y no a creencias vacías, y ahora creo y sé por qué creo en Dios. El Espiritismo no es sólo conocer una filosofía, sino vivenciar experiencias transformadoras. Estar en el Espiritismo y él en mí no es conocer sólo una filosofía, sino vivenciar experiencias transformadoras todos los días. Y me sigue transformando en un ser mejor, porque el gran desafío que propone es enriquecernos a nosotros mismos, como nos indica el Espiritismo, que nos presenta lo impresentable con los instrumentos de progreso que necesitamos para evolucionar.

¿Cómo conoció el Espiritismo y reconoció esa importancia?

Eso fue hace 27 años, todavía en mi adolescencia. Tengo origen religioso cristiano/judío, por el lado materno, cristiano católico, y por el lado paterno, el judaísmo, pero también mi familiar José Nogueira de Sá, tío abuelo que fue pionero en difundir el Espiritismo aquí en mi ciudad y fundador del CEAP en 1912. En cierto modo, influyó en mí con su ejemplo y las organizaciones benéficas que dejó en su nombre. El primer contacto fue leer el libro Nuestro Hogar, pero el contacto en realidad con el Espiritismo fue en la Federación Espírita del Estado de São Paulo, ciudad donde viví 18 años. Tenía alrededor de 25 años y estaba terminando la universidad. Conducido a la sala Cairbar Schutel, escuché una exposición de 15 m sobre el capítulo VI de El Evangelio – El Cristo Consolador, punto 5, Advenimiento del Espíritu de Verdad. Aquella exposición espírita fue tan impactante en mi alma, que me hizo derramar lágrimas sin cesar y, por eso asistí seis veces a la misma exposición, porque repiten varias veces el mismo tema cada 15 minutos y me puse en fila varias veces y en mi interior, dije: "Jesús, cumpliste tu promesa". Tenía mucho sentido para mí porque sufría mucho y me sentía desconsolado en el mundo. A partir de ese momento quise leer todo lo que fue producido por Allan Kardec y luego todos los libros de Cairbar Schutel y las demás obras de la literatura espírita. Y digo que Cairbar fue mi profesor y abrió mi mente a la comprensión sobre el incomparable Maestro Jesús. Aquellos que reemplazan a Jesús por guías espirituales terrenales están en un error extremo. En cuanto a la importancia del Espiritismo, digo en espíritu y verdad que yo estaba perdido y me encontré a mí mismo, porque había estudiado todas las filosofías clásicas y modernas y ninguna de ellas me había dado realmente un norte o sentido de la vida con significado.

¿Y dónde está la influencia de Cairbar Schutel en todo este proceso?

Él fue mi profesor y conductor y me inspiré en su vida y obra y en profunda gratitud. Hice de todo para homenajearlo aquí en Ouro Fino, porque con él aprendí a estudiar, comparar y profundizar en el Espiritismo, y buscar la vivencia de los valores que abracé en las obras sociales y caritativas. Un ejemplo de homenaje al Abanderado del Espiritismo de Brasil fue un programa de radio que mantuvimos durante 18 años, todos los domingos, durante 15 minutos divulgando el Espiritismo para esclarecer y consolar y distribuyendo a través de ese programa 6 mil libros espíritas. El nombre del programa fue "Reflexión sobre el Espiritismo".

¿Qué nos puede decir sobre el movimiento espírita?

El movimiento espírita es toda la práctica de la doctrina espírita, que se asienta en base a la tríada - ética, filosófica y científica. Este trípode conduce a convicciones en la incesante búsqueda de la verdad que ilumina y desarrolla el amor y la bioética por la vida existencial continua con el ser inter existencial que somos. El movimiento espírita para mí es sinónimo de la fraternidad que sólo será posible con el encuentro, la unión para la unificación de los "fraters espíritas", pero para ello necesitamos seguir la primera directiva de la FEB: Toda y cualquier práctica o acción en nombre del Espiritismo en el movimiento espírita debe seguir la orientación de la codificación de Allan Kardec. ¿Cuál es el objetivo de la primera directiva del Espiritismo? El objetivo no es sólo un conjunto de reglas para regular un procedimiento en la práctica espírita, sino que es la filosofía espírita. Esta directriz es muy correcta y la historia del movimiento espírita ha demostrado repetidamente que, al no seguir más las orientaciones de Allan Kardec en las prácticas de la doctrina de los espíritus, no importa cuán bien intencionados seamos, los resultados son invariablemente desastrosos. Es difícil ser espírita cuando nos enfrentamos a la verdad cara a cara, pero la primera directiva nos protegerá de errar un poco menos cada vez.

¿Y sobre la obra de Kardec?

Leo, estudio continuamente, porque es fundamental.  Me esfuerzo por vivenciar a Kardec en mi vida. El Espiritismo es tríptico: ético, filosófico y científico. Un hermano del CEAP objetó la idea de que si el Espiritismo era la tercera revelación, entonces habría muchas otras revelaciones y Kardec estaría desactualizado. Yo conté una historia en respuesta a su pregunta, diciendo que, según el cuento de hadas de Ricitos Oro, una pobre niña que pasaba hambre en su casita en el bosque salió triste en busca de una solución y encontró una casa en la que había tres platitos olorosos de puré. Probó el primer platito de puré, pero estaba frío y pensó que estaba malo; fue a probar el segundo platito de puré y estaba demasiado caliente y se quemó la lengua; pero no se rindió y se dirigió al tercer platito, que estaba a la temperatura correcta y se alimentó y tuvo fuerzas para continuar su viaje, es decir, el tercero es el equilibrio. El Espiritismo es el abc que nos da este equilibrio, que nos enseña a leer y entender la espiritualidad para leer las próximas revelaciones. Necesitamos aprender a leer, es decir, a espiritualizarnos. En cuanto al propio Kardec, el Apóstol de la Renovación, escribí un libro, que publiqué hablando de esta personalidad singular, en el que analizo esta personalidad autorrealizada. Kardec no dijo que el Espiritismo lo explica todo, pero afirmó que hay una explicación para todo.

¿Y el ejemplo de Chico Xavier, en su opinión?

No tengo palabras para hablar de Chico Xavier. Pero siento una inmensa gratitud por él y lo amo mucho por todo lo que ha hecho y hace por nosotros los espíritas. Es un ejemplo de buen espírita y verdadero cristiano; como se dice en El Evangelio según el Espiritismo, es un hombre de bien, un ejemplo cercano para nosotros. Y sus obras son, indudablemente, muy importantes para nuestro crecimiento moral-ético, etc.

De sus experiencias espíritas, ¿qué le gustaría destacar?

El estudio continuado de la doctrina espírita en el CEAP, en el grupo mediúmnico y la divulgación como expositor y en las prácticas en instituciones sociales que promueven a nuestro semejante y a nosotros mismos, haciendo posible que vivamos lo que aprendemos del Espiritismo, porque el amor que se siente y que se da nos cura y cura al otro. Vivenciamos esto aquí en Ouro Fino en la institución Karydah, centro de salud mental modelo CAP-I, en el Albergue Nocturno A Casa do Caminho, que acoge a personas en estado de vulnerabilidad, que viven en la calle, y también en la Casa da Criança, que promueve la salud mental de los niños carentes de la red pública. Y muchas otras realizaciones llevadas a cabo en conjunto con mis hermanos.

¿Qué le gustaría decirnos a todos los espíritas sobre la importancia del compromiso espírita y cómo debemos cumplirlo?

En primer lugar, necesitamos amarnos unos a otros como hermanos, acercarnos y unirnos cada vez más en la divulgación de la doctrina espírita. Divulgar, esclarecer y consolar con palabras, sentimientos y acciones el Espiritismo. Amar a nuestro prójimo, porque el otro es el puente que nos llevará al reino de los cielos tan deseado. Y tengamos la seguridad de que el amor revolucionará la faz de la tierra. El Espiritismo nos sustenta en el amor perseverante por el prójimo. Somos espíritas. Somos libres para hablar del Espiritismo. ¡Qué bueno es ser espírita, qué bueno es poder divulgar la doctrina espírita!

¿Algo más que quisiera añadir?

El apóstol Pablo dijo que la muerte sería vencida y fue vencida con la conciencia de la vida futura, porque había una brecha entre la vida física y la vida espiritual después de la muerte del cuerpo físico. El Espiritismo resolvió el problema sondeando a través de la mediumnidad este mundo metafísico y estableció un vínculo entre las dos dimensiones existenciales y descubrimos que somos seres interexistenciales. Por lo tanto, el Espiritismo es la voz de la inmortalidad y debemos proclamar esto con la fuerza del clarín. La vida no es finita. Ella triunfa en el mundo espiritual y, como dijo Cairbar Schutel, la muerte hace el traslado de nuestro ser inmortal a nuestra patria espiritual.

Sus palabras finales.

El Espiritismo saca a Jesús del cerco dogmático en el que la religión lo mantiene y lo pone en nuestra vida cotidiana. Jesús es simple y la sencillez es el sello de la verdad. Simplex siggilum veri. El excelso psicoterapeuta por excelencia nos llama al amor. ¿El resultado de esta convocatoria? Cuando me convencí de que era sólo un instrumento de la bondad de Dios para mi prójimo, amé más sin esperar nada a cambio, porque ya había recibido la oportunidad de amar. Por lo tanto, estoy agradecido a todos y desde ya soy el más humilde y el más obediente servidor de siempre en el sentimiento caritativo por creer y saber que el amor, la justicia y la verdad se armonizarán en el porvenir, para introducirnos a todos en el reino de las Bienaventuranzas. Que la paz de Dios, la paz de Cristo y la paz interior se instalen en nuestros corazones.

 

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita