Implacable plano multidisciplinario de sabotaje al Espiritismo

Sin el Espiritismo, la Doctrina de Jesús estaría aún sofocada en los paredones de los dogmas creados por hombres apartados de la esencia y de la base del Cristianismo

Parte 2 e final

“Todo reino dividido contra sí mismo es devastado; y toda la ciudad, o casa, dividida contra sí misma, no subsistirá”. – Jesús. (Mt., 12:25)

“Pues no Jefe. Es lo siguiente: Lanzamos a los espíritas unos contra los otros en la arena de la cizaña, alimentando sus disputas con múltiples y variados ingredientes explosivos, tales como: cuerpo fluídico de Jesús versus cuerpo carnal; virginidad de María, madre de Jesús, versus no virginidad; comer carne versus abstinencia de carne; Espiritismo es religión versus Espiritismo no es religión; Kardec versus Roustaing; Kardec versus Pietro Ubaldi; Kardec versus Ramatis. También incluimos en nuestro menú de sabotaje al Espiritismo lo siguiente: Colocamos un punto católico en muchos centros espíritas, en los cuales ya hacen hasta ceremonias de bautizos y bodas; ya en otros colocamos un punto umbandista, pues finalmente la Umbanda es más “fuerte” que el Espiritismo; estimulamos un ancho espectro de sabotaje en las tareas de los verdaderos trabajadores, por los espíritas ociosos, envidiosos y despechados; inducimos muchos al uso y abuso del alcohol y quejándonos utilizamos el “inofensivo” sofisma: “sólo bebo socialmente”; inducimos igualmente al uso de tabaco, drogas pesadas, (al final todo el mundo la usa); ¡tras las adicciones debidamente implantadas, el señor necesita ver lo que nosotros conseguimos en el área del sexo disparatado!...

Solo unos poquísimos espíritas leyeron la “Revista Espírita”

Alimentamos interminables polémicas y falta de respeto a las veneradas Instituciones Espíritas por la propia prensa de ellos; dinamizamos la vanidad, el orgullo, la ambición, el personalismo; diseminamos la desconfianza; inducimos subrepticiamente la maledicencia con todo su potencial destructivo; valoramos la asistencia pura sin respaldo del Evangelio y de la Codificación para los asistidos, finalmente la gente ignorante no va a entender a Kardec aún, y de Jesús ellos oyen hablar en sus iglesias; casi todos los días cerramos reuniones de estudios y colocamos en sus lugares “reuniones mediúmnicas” comandadas por nuestros apaniguados encarnados como por “mentores” desencarnados pertenecientes a nuestras huestes; no estimulamos los detestabais estudios doctrinarios, provocando el sueño y el enfado en todos; ¡así también, durante las charlas evangélico-doctrinarias, lanzamos un somnífero en el ambiente y todos los asistentes se “desdoblan” que es una belleza!

¡El señor necesita oír las letras de algunas músicas cantadas en los Centros Espíritas! ¡Totalmente divorciadas de la Codificación!... Y cuando alguien llama la atención para eso viene la réplica salvadora: ¡¡¡“permiso poético”!!! También diseminamos en el medio espírita incontables obras apócrifas “psicografiadas” a través de nuestros representantes que dan respaldo a nuestros compañeros invisibles, finalmente la Casa Espírita precisa de dinero para sostenerse y el libro es una verdadera “mina de oro”, y no importa la calidad y mucho menos si existe en el respaldo doctrinario; ¡¿y quien está interesado en respaldo doctrinario, Kardec no es más estudiado?! Tiene una tal “Revue Spirite” escrita por el propio Kardec que conseguimos sabotear la lectura y propaganda. Sólo unos poquísimos espíritas ya la leyeron, y la mayor parte de los “espíritas” ni oyeron hablar de esa tal “Revue Spirite”. ¿El señor lo sabía, Jefe? Hay “espírita” tan invadido por nuestros agentes que para desviarlos de una miserable “Serie André Luiz” son llevados a pensar que “Agenda Cristiana” es un cuaderno para apuntar compromisos.

El “endiosamiento” de médiums y oradores

Tienen un libro de esa abominable serie llamado “Evolución en Dos Mundos” que ni la gente formada en la Universidad tiene coraje de leer. Tenemos agentes especializados en dinamizar desvíos de lecturas que atenten contra nuestro reinado...

Últimamente, lanzamos un mote espectacular, que ya está diseminándose por todas partes: ¡KARDEC ESTÁ DESFASADO!  A partir de ahí, el señor necesita ver Jefe, la cantidad de congresos que son realizados para “actualizar a Kardec”; buscamos, por todos los medios sustituir los pases magnéticos por terapias alternativas (cromoterapia, fitoterapia, litoterapia) y todo cuanto es “pía” que el señor pueda imaginar; sugerimos el uso de ropa blanca (basados en la lección de Jesús acerca de los túmulos encalados): limpios por fuera, para nadie ver la podredumbre de dentro; estamos últimamente estimulando la creación de asociaciones espíritas de eso y de aquello, dividiendo el rebaño espírita en áreas estancadas, basado en la lección del conjunto de varas: dividir para debilitar. Envalentonamos al “endiosamiento” de médiums y oradores, con buenos dividendos de éxito, pues la vanidad está siempre aguardando la hora para aparecer: existe hasta un “orador espírita” que ya llega avisando: “Por favor, cuando yo termine mi conferencia, no me aplaudan”. Él ya sabe, de antemano, que va a “arrasar”. ¡¿Reforma íntima?! ¡¡¡Ni pensar!!!  ¡Que todo quede como antes en el castillo de Abrantes! Mientras los espíritas discuten y se desentienden por bagatelas, la reforma íntima de ellos “va para el pantano”, y aún llevan juntos, para el mismo pantano: el Evangelio del Galileo y la Codificación de Kardec, con todas las obras subsidiarias.

Los Espíritas están desencarnando muy mal

¡Así, mi Jefe, con este vasto menú de cizañas, verdadero y sabroso banquete para nuestros compañeros, no existe movimiento espírita que aguante!  En poco tiempo nadie oirá más hablar de Kardec y tampoco de esa maldita Codificación.  Con eso, las regiones infernales/umbralinas tendrán la garantía de un harto plantel.

¡¡¡El señor necesita ver como los espíritas ya están desencarnando mal!!!... ¡Tras un enoooooooooorme periodo de perturbación post-mortem, ellos quedan como fieras cuando descubren que no tuvieron la recepción que juzgaban merecer! Querían banda de música y alfombra roja, y encuentran las sombrías regiones umbralinas envolviéndolos en densas tinieblas, al son de las carcajadas estridentes de nuestros secuaces.

Nuestros poderosos tentáculos los abraza desde el portal del barro de la tumba, trayéndolos para las profundidades umbralinas…

Pero, para ser sincero con el señor, yo confieso que uno u otro nos escapa, como ocurrió ya hace algún tiempo: Hubo uno que salió allá de Uberaba que dejó muchos de nuestros invidentes de tanta luz.  Intentamos de todo, pero con ese no hubo forma. ¡El minerito difícil!  ¡Escurriendo igual como el jabón! Ahora él está tan allá arriba que no da ni para mirarlo. ¡Pero eso es cosa rara! Muy difícil de ocurrir... La mayoría quedan aún prendidos en las mallas de nuestras intricadas redes”.

Bien, ya dimos la palabra a Belcebú, vamos a contrabalancear, dándola ahora al ínclito Maestro Lionés, para un mensaje de aliento a los Verdaderos Espíritas o Espíritas Cristianos ¹:

“(...) ¡¡¡Que no han hecho!!! ¡Qué es lo que no han puesto en acción para asfixiar en la cuna al niño!  (...) ¡Si es justo censurar los que han intentado explotar el Espiritismo o desnaturalizarlo en sus escritos, sin haberlo previamente estudiado, cuan más culpables no son los que, tras haberle asimilado todos los principios, no contentos de apartarse del seno, contra el vuelcan todos sus esfuerzos!

Un día todos se pondrán bajo la misma bandera: la Caridad

(...) ¡Desde que volví para el mundo de los Espíritus, volví a ver algunos de esos infelices!  ¡Se arrepienten ahora; lamentan la inacción en que quedaron y la mala voluntad de que dieron prueba, sin lograr, sin embargo, recuperar el tiempo perdido!... Volverán en breve a la Tierra, con el firme propósito de concursar activamente para el progreso y se verán aún en lucha con las tendencias antiguas, hasta que definitivamente triunfen.

Fuera de creer que los espíritas de hoy, esclarecidos por esos ejemplos, evitarían caer en los mismos errores. Así, sin embargo, no es. Aún por largo tiempo habrá hermanos falsos y amigos desatinados; pero, tal como sus hermanos más viejos, no conseguirán hacer que el Espiritismo salga de su directriz.

Aunque causen algunas perturbaciones momentáneas y puramente locales, no por eso la Doctrina peligrará. Al contrario, los espíritas desvariados bien deprisa reconocerán el error en que incidieron y vendrán a colaborar con mayor ardor en la obra por un instante

Dice aún nuestro querido maestro Allan Kardec: “(...) Cuando Jesús declara: “No creáis que yo haya venido a traer la paz, pero, sí, la división”, su pensamiento era este: “No creáis que mi Doctrina se establezca pacíficamente; (...) la división reinará en el seno de una misma familia. Pero a la guerra sucederá la paz; al odio de los partidos, la fraternidad universal; a las tinieblas del fanatismo, la luz de la fe esclarecida. El Consolador, el Espíritu de Verdad, vendrá a restablecer todas las cosas, es decir, que, dando a conocer el sentido verdadero de mis palabras, que los hombres más esclarecidos podrán finalmente comprender pondrán término a la lucha fratricida que desune a los hijos del mismo Dios.  Verán de qué lado están los amigos y los enemigos de la tranquilidad de ellos.  Todos entonces se pondrán bajo la misma bandera: la de la Caridad, y las cosas serán restablecidas en la Tierra, de acuerdo con la Verdad y los principios que os he enseñado.”