La Organización Paracientífica Adolfo Fritz está situada en Rio Novo-MG. Allí, una vez al mes, centenares de personas acuden al galpón-sede para ser atendidas por el conocido Espíritu, a través de la mediumnidad de Francisco Monteiro, más conocido como Chico Monteiro (foto). Llegan de todas partes de Brasil y del exterior y pasan por las

Chico Monteiro vive en la ciudad de Rio de Janeiro donde también hace otras atenciones en el área Holística. Es fitoterapeuta, trabaja con esencias Florales, Aromaterapia, Coloracupuntura, Relajamiento, PNL, Desarrollo del Trabajo y Metas, y es miembro de la Federación de la Asociación Italiana de Psicoterapia.

Para conocer más sobre su trabajo, conversamos con el médium.

Estimado Chico, ¿cómo comenzó todo?

Hace ya treinta y un años que hacemos este trabajo y que estamos en el camino cuidando esta semilla con la gracia mayor del Gran Arquitecto del Universo, Dios. Hoy sentimos una conexión entre las medicinas tanto la convencional como la espiritual o espiritualista. Encuentro esto muy bueno. Hoy ya existe un curso de Medicina y Espiritualidad en la USP, muy bien dirigido por el Dr. Sergio y todo un equipo. Y esto es muy importante para la Humanidad.

¿Cómo es la rutina de las atenciones?

El fenómeno que ocurre allí es el de la ectoplasmia, es decir, la energía que emana de las manos y toca a las personas. Necesitamos programar bien porque atendemos a un promedio de 1,500 a 2,000 personas en un sábado, de allí la necesidad de tener una buena programación para que no surjan problemas. Gracias a Dios tenemos un equipo muy fuerte y muy bueno que se juntó para hacer lo mejor para las personas que nos buscan.

Háblenos un poco del equipo espiritual

Comenzamos un trabajo con el Dr. Adolfo Fritz hace treinta y un años. Luego se fueron uniendo a este equipo otros médicos, otros científicos del espacio y de repente estamos hoy, con cuatrocientos veintitrés seres, trabajando en equipo. Es un equipo espiritual muy grande y esto es muy importante. Muchas cosas están siendo desarrolladas, muchos medicamentos creados para la Humanidad, muchos aparatos y muchas otras cosas que están llegando ahora para que podamos tener una vida mejor.

Esos aparatos ¿son creados por nuestra tecnología o son aparatos espirituales?

Son aparatos que vienen de allá para acá y son pasados a los científicos, los ingenieros, y ya están siendo desarrollados aquí en la Tierra; algunos ya están siendo usados.

La atención ¿es hecha en el periespíritu con resultados en el cuerpo físico?

De hecho el trabajo comienza allá dentro, en el periespíritu, y es empujado hacia el cuerpo físico. Son los miasmas o algunas otras cosas que todavía estaban presos en el periespíritu perjudicando al cuerpo físico; de allí son eliminados. Entonces, es un trabajo muy cuántico, muy del futuro.

Las recetas ofrecidas a los pacientes ¿contienen remedios alopáticos y homeopáticos?

La alopatía es muy poco utilizada hoy y pensamos que en un futuro muy próximo no usaremos alopatía dentro del trabajo. Deberán ser recursos materializados. Ya se colocan en los cuerpos de las personas muchos medicamentos materializados. Creo que en el futuro la cosa va a ser por allí.

Mientras las personas esperan ser atendidas, las piedras son materializadas en todo momento y aparecen en el suelo. ¿Cómo ocurre esto?

Son materializaciones hechas por el Espíritu José Grosso, muy querido nuestro. Y estamos muy felices porque ocurre durante todo el tratamiento y las personas se sienten bien con la energía de las piedras; y esto es muy bueno, muy importante, y viene a despertar la atención del ser humano hacia un acontecimiento diferente. A veces, están sentadas y de repente surge un cristal, una piedra. Pienso que es muy bueno y trae beneficios para la Humanidad. Creo que José Grosso a través de esas materializaciones está demostrando su alegría a las personas.

La platea espera con mucha tranquilidad ser atendida. Existe además un olor muy fuerte de flores. ¿Tiene esto que ver con las materializaciones?

Mucho. La energía que está allí cuando la persona entra en aquel local ya está preparada para calmarlas. Estamos felices porque durante todos estos años la cosa ha ido progresando y hoy sentimos a las personas con los corazones más abiertos.

¿Su trabajo tiene relación con el Movimiento Espirita Brasileño?

Una vez conversando con Chico Xavier, me dijo “Chico, esto que usted hace es algo que vino para usted, ya vino con esto, traído de su pasado, de sus vidas anteriores.” Entonces es algo espiritualista. Después me encontré con Leonardo Boff, un teólogo que vino a tratarse con nosotros, y me dio una idea muy importante que es la de colocar nuestra organización como una Organización transcientífica y no una Organización paracientífica. Estamos pensando en esto; vamos a ver. Respeto todas las religiones, no tengo nada contra nada y no puedo hablar mucho de religión, a pesar de mi profundidad espiritual. Allí recibimos personas de todas las religiones y del mundo entero. Evitamos hablar de Espiritismo para no cohibir a los que no son espíritas. Sé que todos los caminos llevan a  Dios y creo que el lado del espiritualismo va a modificar el planeta Tierra.

Notamos que las personas al ingresar a las cámaras de atención modifican sus vibraciones, homogeneizándolas. ¿Cómo se da este hecho, una vez que entran cincuenta por cada vez en cada cámara?

Cuando las personas ingresan, hay el lado masculino y femenino, y ya comienzan a recibir un tratamiento de energía; entonces muchas sienten que no están allí. De hecho tienen este mismo tipo de visión.

¿Los tratamientos son prolongados o es suficiente una atención?

Hay un seguimiento mediante fichas. Hay casos en que la persona debe regresar y existen casos en que la espiritualidad dice que la persona está bien. Si desea regresar pueden hacerlo de vez en cuando. Pero hay quienes quieren regresar siempre y van trayendo a  otros y vamos conduciendo todo esto. Pienso que, si no hubo frutos, valió la pena la belleza de las flores, y si no hubo flores, valió la pena la sombra de las hojas, y si no hubo hojas, vale la pena la intención de las semillas.

Además de otros libros, usted tiene uno titulado: “Yo viajé en un Disco Volador”. ¿Cómo es la relación del trabajo con esas entidades?

Tenemos una conexión muy grande con ese otro lado, esos otros seres. Ellos están muy preocupados en relación a nuestro planeta, en relación a la raza humana. Hubo una unión entre la parte espiritual y esos seres para dar un mayor consuelo a la Humanidad. Encuentro esto muy bueno.

¿Son ellos de nuestro sistema solar o son de otros sistemas?

Unos son de nuestro sistema y otros de más allá de nuestro Sol. Existe un planeta llamado Noron, que está muy cerca; es un planeta amarillo. Incluso estoy escribiendo un libro sobre esto. Todo allá es amarillo y bonito. El oro allá no tiene el mismo valor que en nuestro mundo. Entonces el asfalto es oro, las casas son hechas de oro. Le puse el nombre de planeta amarillo y creo que en un espacio de tiempo no muy largo los hombres descubrirán este planeta que está muy cerca de nosotros. Los habitantes de allá están muy preocupados por la raza humana.

Sabemos que “Hay muchas moradas en la casa del Padre”. ¿Piensa usted que esos seres están trabajando para que todos puedan comprender y vivenciar esto más rápidamente o será una conquista natural y lenta de la humanidad?

Ya tuvimos grandes momentos con esos seres y ahora, más que nunca, tenemos  muchos encuentros con ellos. Las personas necesitan acabar con el “no creo”. Es necesario crear un intercambio para que el ser humano pueda evolucionar aún más.

¿Por qué su trabajo es realizado en Rio Novo?

Atendíamos también en otras ciudades. Pero ésta es una microrregión muy rica en conocimientos, tanto de espiritualidad como de esos seres amigos nuestros. Es privilegiada y creo que tenemos que “sembrar las ideas donde la energía fluya”, como dijo nuestro querido Chico Xavier. Pedro Leopoldo fue en su inicio, pero él fue a sembrar sus ideas en otra localidad.

¿Qué marca en el médium Chico Monteiro todo este trabajo?

En todos estos treinta y un años han ocurrido muchas cosas y pasamos por muchos momentos, y creo que no ha habido ningún momento mejor o peor; todos fueron importantes para nuestro crecimiento aquí en el planeta Tierra.

¿Cuál es su mensaje final?

Yo digo siempre que vale la pena la intención de las semillas que son lanzadas aquí en el planeta. Vamos a juntar fuerzas para un mundo mejor.