Entrevista

por Lívia Prada Seneda

La tarea de evangelizar no se limita sólo a los evangelizadores

El pensamiento expresado en la frase de arriba es de Elisangela Dias de Toledo (foto), nacida en Apucarana, hace 21 años radica en Londrina, nuestra entrevistada esta semana. Profesora de la red pública de Paraná en la disciplina de Educación Especial, es Licenciada en Letras y Pedagogía, con posgrado en Metodología de Acción Docente, Evaluación Educativa, Psicopedagogía y Educación Especial. En el movimiento espírita, es evangelizadora desde 1992. Trabajó en el Departamento de Infancia y Juventud (DIJ) de la USEL - Unión de Sociedades Espíritas de Londrina y trabaja en el DIJ de la Federación Espírita de Paraná desde agosto de 2008, siendo coordinadora de juventud desde 2013 hasta la actualidad.

Elisangela nos concedió la siguiente entrevista:

¿Cómo empezó a trabajar en la evangelización?

Empecé a trabajar en la evangelización a la edad de diecisiete años, por invitación de la casa espirita. La casa espírita que frecuentaba en Apucarana siempre buscó el protagonismo juvenil, y para ello proporcionaba a los jóvenes la oportunidad de asistir a cursos en el área de la evangelización. Fueron tres años de preparación, en los que mi evangelizadora, en este caso mi tía Judite Dias de Toledo, siempre invitaba a los jóvenes de la casa a los cursos del DIJ/FEP. En esa época, coordinaba la DIJ/FEP Maria Helena Marcon (conocida como Malena), actual coordinadora del departamento de Comunicación Social Espírita, y realizaba cursos de formación inicial y de recursos didácticos pedagógicos. Cuando tenía catorce años, participé en un curso de narración de historias ofrecido por la FEP, impartido por Malena. En ese curso, decidí que quería evangelizar. La casa espirita siempre anima a los jóvenes a realizar el trabajo en el bien. Cuando recibí la invitación, me puse muy feliz. Así empezó todo.

¿Cuáles son algunos de los desafíos a los que se enfrentan los evangelizadores?

Creo que el primer desafío al que se enfrentan hoy los evangelizadores es aceptar la tarea de evangelizar, porque atraviesa muchos aspectos específicos. El acto de entrar en la sala de evangelización e impartir la clase va mucho más allá, exige investigación, conocimiento, dedicación, disciplina y rutina. La calidad de la tarea exige al evangelizador el mayor desafío de sí mismo, que es su autoconocimiento, vencer sus dificultades personales para poder llevar a cabo una evangelización de calidad. Tener un discurso sensible, una escucha y una mirada sensibles, como nos orienta los Documentos de Orientación para la Acción Evangelizadora, exige nuestro cambio personal, el cambio de paradigmas y reflexiones de nuestras acciones. La calidad de la tarea atraviesa la calidad doctrinaria, que es tener claridad de los postulados de Kardec para ser el mediador de este contenido con el niño y el joven.

Según Sandra Borba, los evangelizadores también pasan por los siguientes desafíos: calidad en las relaciones, calidad organizativa, calidad pedagógica.   

La calidad de las relaciones es la construcción de lazos basados en la fraternidad y los celos interactivos y comunicativos vivenciados en la institución espírita, y aquí vienen los melindres: una palabra, una mirada puede herir y hacer que nos salgamos del trabajo.

La calidad organizativa se refiere a la organización de la tarea de evangelizar.  Estructura operativa: espacios físicos, horarios, recursos humanos y materiales. Estructura didáctico-doctrinaria: planificación, seguimiento y evaluación de las acciones.

Y la calidad pedagógica es el conocimiento de la metodología y de la tecnología al servicio de la evangelización.

Este conjunto de ítems nos lleva a los desafíos que encontramos en las salas, tales como: ¿cómo capturar la atención de los niños y jóvenes en la era de la tecnología? (calidad pedagógica) Creo que el uso de las técnicas de nuestro tiempo: contar historias con teatro de títeres, clases con flanelógrafos, juegos cantados (actividades lúdicas relacionadas con la música, por lo general del cancionero infantil) puede ayudarnos en este proceso. Para los jóvenes, proporcionar técnicas de lecturas diferenciadas, técnicas de interpretaciones al servicio de la doctrina espírita. ¿Qué hacer con el abrumador desaliento que abate durante el trabajo? (calidad de las relaciones) Como le diría Abigail a Pablo, en el libro Pablo y Esteban: ¡Espera!  Cada espíritu tiene su proceso individual, el trabajo en equipo nos va perfeccionando para que podamos desarrollar nuestra visión basada más en la espiritualidad que en la visión material. Por eso es importante la permanencia en el trabajo.  ¿Qué contenidos debo ofrecer? (calidad organizativa) Hay materiales en Brasil que ofrecen la estructura del currículo y su importancia desde hace 42 años. 

¿Quién puede convertirse en evangelizador y qué cualidades se necesitan para esta tarea?

Que le gusten los niños o los jóvenes, es el primer paso. El segundo paso, según el documento de Orientación para la Acción Evangelizadora Espírita de la Juventud, es tener la claridad de lo que su trabajo tendrá "un papel relevante para acercar el mensaje espírita a las mentes, los corazones y las manos de los niños y jóvenes".  Puede convertirse en evangelizador quien guíe su acción sobre los principios de la fraternidad, del amor y la coherencia doctrinaria, contextualizando las enseñanzas a la realidad y a la experiencia de los jóvenes; quien es sensible, coherente, tiene empatía, es amigable, responsable, tiene conocimiento doctrinario y está vinculado a un grupo de estudio en la casa espírita. Como dicen Sandra Borba y Cesar Braga Said, "es aquel que juzga que no está listo".

¿Puede contarnos una vivencia que la haya marcado mucho?

Lo que siempre me marca es participar en los encuentros de los jóvenes, porque a través de ellos sedimentamos nuestra experiencia del evangelio, estudiamos, estrechamos los lazos de amistad y fortalecemos el movimiento espírita. ¡En esos momentos, podemos verificar, como dice Bezerra de Menezes, al equipo "DIJesus" en acción! Participar en la preparación del evento y luego verlo en su ejecución es maravilloso. Tuve la oportunidad de participar en la CONMEL (Confraternización de Juventudes Espíritas de Londrina), actual EJEN (Encuentro de Jóvenes Espíritas de la Interregional Norte), como participante. Y para mí, este momento me encandiló, porque éramos cinco años de mi infancia/juventud en esa época, y fuimos yo, Alessandra Guizelini (actualmente profesora de la red del estado de Paraná y todavía activa en la tarea de evangelizar en Apucarana) y mi hermana menor en el evento. Cuando llegamos a CONMEL, nos maravillamos al ver a 78 jóvenes reunidos en el Lar Anália Franco, donde se reunieron varias ciudades de la región. Ese mismo año 1994, fuimos en Pascua al Encuentro De Confraternización de Juventudes Espíritas de Paraná. Encontramos allá más de trescientos jóvenes de todo el estado, y esto nos dio la certeza de que no estábamos solos. 

Desde entonces, han pasado años trabajando en favor de estos eventos en Paraná. En cierto modo, agradezco la oportunidad de coordinar a los jóvenes en el IDI/FEP desde 2013, lo que me permitió la oportunidad de coordinar dos encuentros estatales en 2014 y 2017. Un encuentro de la Comisión Regional del Sur (CONBRAJE Sul) y un encuentro nacional (CONBRAJE Nacional). Todas estas experiencias me afirman que es posible realizar un trabajo en favor de la juventud, que es posible evangelizar y proporcionar al joven un protagonismo como aconsejan los documentos de orientación de la OAEJ: "[...] El protagonismo aboga por un tipo de relación pedagógica que tiene como base la solidaridad entre generaciones, la colaboración educador-educando como medio y la autonomía de los jóvenes como fin".

En el trabajo con el movimiento, con la elaboración de estos eventos, se verifica que es realmente una acción entre generaciones, que una contribuyó a la otra y juntos formamos un gran equipo. Aquellos que han estado en el camino durante más tiempo pueden orientar con seguridad el trabajo, los que están empezando pueden contribuir con su idea, fuerza y dinamismo para que el trabajo sea más cercano y alcance la meta con los jóvenes. Sin olvidar que no estamos solos, sino con un gran equipo espiritual que nos asesora en todo momento.  Incluso cuando estamos físicamente distantes, cuando nos encontramos, las ideas fueron inspiradas en los rincones más lejanos para que pudiéramos ejecutarlas de acuerdo con el mensaje de Cristo y la claridad de los postulados espiritas.

Las palabras de Jesús "Id y evangelizad a todos los hombres" (Marcos 16:15) se hacen aún más importantes hoy día. ¿Sólo los evangelizadores pueden difundir las enseñanzas de Jesús?

Todos los que estamos en la casa espírita somos representantes de Cristo en su amplitud. Según Sandra Borba, "cuando Jesús afirmó en el momento conocido como la ascensión del Señor: Id y evangelizar a todos..., nos dejó un compromiso serio y difícil: divulgar la Buena Nueva junto a la criatura humana, sin que sus condiciones peculiares representen obstáculos ni limiten este acceso". De este modo, tenemos un mayor compromiso cuando estamos en la tarea de evangelizar. Pero este término no está restringido sólo a los evangelizadores, sino que está destinado a todo trabajador de la casa espírita que tiene como objetivo mejorar y ayudar a los demás a transformarse.

¿Le gustaría hacer un comentario final?

Quisiera concluir con este mensaje de Bezerra de Menezes, que se aparece en el libro Orientación para la Acción Evangelizadora de la Juventud:

Hijos

Roguemos a Jesús por la obra que continúa bajo el apoyo divino. Que no haya desánimo ni prisa, sino sobre todo, equilibrio y amor. ¡Mucho amor y devoción! La Evangelización Espírita Infantojuvenil se expande como un sol benéfico bendiciendo los campos al amanecer. El servicio en sí, sin palabras articuladas, pero a la luz de la experiencia, nos hablará de cualquier cambio que sea necesario, mientras que, con el apoyo de la oración, estableceremos el connubio de las fuerzas con lo Alto, para que nos sintamos amparados por las inspiraciones del bien. De vez en cuando necesitaremos una pausa de evaluación para revisar el alcance y la calidad de los servicios prestados y las tareas realizadas. Sólo así podemos verificar el mejor rendimiento de nuestros propósitos. Unámonos, que la tarea es de todos. Sólo la unión nos da la fuerza para cumplir con nuestros servicios, portando la fraternidad como el lema y la humildad como garantía del éxito. Con Jesús en los emprendimientos del Amor y con Kardec en el poder de la Verdad, tendremos toda la orientación en nuestros pasos, todo el equilibrio para nuestra conducta. Hermanémonos en el sublime ministerio de la evangelización de las almas y caminemos hacia adelante, avanzando con optimismo. Los amigos y compañeros desencarnados pueden inspirar y sugerir, advertir y esclarecer, pero es necesario reconocer que la oportunidad del trabajo efectivo es una oportunidad bendita junto a los que disfrutan de la bendición de la reencarnación. ¡Jesús espera! Cooperamos con Cristo en la evangelización del Hombre. ¡Paz!

Bezerra

(Mensaje recibido por el médium Júlio Cezar Grandi Ribeiro, en sesión pública el 8/2/1982, en la Casa Espirita Cristiana, en Vila Velha, Espírito Santo.)

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

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 Revista Semanal de Divulgação Espírita