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Entrevista Português Inglês    
Año 6 299 – 17 de Febrero de 2013
ORSON PETER CARRARA       
orsonpeter@yahoo.com.br     

Matão, São Paulo (Brasil)
 
Traducción:
Ricardo Morante - rmorante3@yahoo.com
  

 
Valentim Aparecido Fernandes: 

“Siempre podemos hacer
un poco más”
 

El colega paulista nos habla sobre su iniciación en el Espiritismo y de su experiencia acumulada en muchos años de servicio en la Casa Editora O Clarim, de Matão-SP
 

Funcionario de la Casa Editora O Clarim hace más de 30 años, Valentim Aparecido Fernandes (foto), natural de Boa Esperanza do Sul y residente de Matão, ambos municipios localizados en el Estado de São Paulo, se vincula actualmente a los Centros Espíritas O Clarim y Allan Kardec de esa ciudad, en los   cuales   trabaja   como   programador  de  las

conferencias, colaborador de actividades y, en segundo término, como responsable del Departamento de Orientación Doctrinaria y presidente del Consejo Deliberativo. Espírita activo desde 1989, Valentim también ofrece conferencias y tiene una respetable experiencia en el área de unificación del movimiento espírita, como revela en la siguiente entrevista que gentilmente nos concedió.

¿Cómo y cuándo se involucró en la Doctrina Espírita?

Conocí la Doctrina Espírita en Araquara en 1980, cuando aún enamoraba a mi actual esposa Fátima. Teniendo ella mediumnidad, comenzaron a aparecer las primeras señales y por orientación de amigos fuimos a la Sociedad Espírita Obreros del Bien para que ella recibiese tratamiento espiritual. No tuvimos continuidad. Tal vez no estábamos preparados para absorber las enseñanzas de la Doctrina Espírita. En octubre de 1981 entré a la Casa Editora O Clarim para trabajar como compaginador y la obligada lectura de los textos me comenzó a encantar, sobre todo los de Cairbar Schutel. Comencé a frecuentar las reuniones del Centro Espírita Amantes de la Pobreza (hoy Centro Espírita O Clarim), sin asumir mayores compromisos, pero en 1989 el llamado apareció nuevamente, con la mediumnidad de mi esposa invitándonos al trabajo. Apoyándola a ella, y por la necesidad de mi esposa de trabajar en el área de la mediumnidad, me involucré de una vez con la Doctrina Espírita. A menudo digo que debo a la mediumnidad de ella el hecho de haber conocido el Espiritismo con más profundidad.

¿Qué experiencia considera la más importante después de trabajar tantos años en la editora fundad por Cairbar Schutel?

La posibilidad de conocer de cerca el trabajo del “Embanderado del Espiritismo”, el contacto con sus obras, las dificultades de su época y el emprendimiento de ese Espíritu de vanguardia. Eso es lo que nos motiva al trabajo de divulgación de la Doctrina Espírita, dentro de nuestras posibilidades y limitaciones.

¿Cuál ha sido la experiencia más resaltante en todos estos años vividos en la Casa Editora O Clarim?

Fue el acompañar de cerca los esfuerzos hechos por los directores de la institución para mantener la Casa Editora fiel a los conceptos de su fundador, Cairbar Schutel. Hoy, son lanzados casi a diario, por el conjunto de editoras, libros que no siempre tienen compromisos con la fidelidad doctrinaria, con la defensa de los conceptos establecidos en la codificación,  sino sólo con objetivos comerciales. Mantenerse “vivo” en un panorama como éste, teniendo que acompañar a las evoluciones tecnológicas necesarias y competir con las “novedades que fascinan” no es fácil. Se necesita mucha perseverancia y mucho trabajo. Sin necesidad de citar nombres, esos esfuerzos siempre me han incentivado a estar atento a lo que ocurre en el movimiento espírita.

En la vivencia con el movimiento espírita local, regional y estatal ¿qué es lo usted considera de gran utilidad?

Creo que la oportunidad para adquirir lo aprendido, intercambiar experiencias y hacer amistades son el punto fuerte de esta convivencia. Como el movimiento espírita es hecho por idealistas que dedican parte de su tiempo disponible a las actividades doctrinarias, sin contar con profesionales para eso, el estar juntos, el ir más allá de las paredes del Centro Espírita, es por demás gratificante.

En las reuniones de los órganos de unificación, ¿cuál es la lección más provechosa que puede ser usada en favor del movimiento espírita?

Los órganos de unificación, aunque no tengan por parte de los dirigentes espíritas la consideración debida, ejecutan un trabajo de suma importancia. Hace 21 años participando de esas reuniones, pude ver de cerca el esfuerzo de abnegados compañeros que sueñan con un movimiento espírita más unido. La lección que puedo sacar de eso es que siempre podemos hacer un poco más, aun con dificultades, o incluso distantes de lo que deseamos. Recuerdo siempre de una frase de nuestro querido José Antonio Castilho, quien ideó las Ferias del Libro Espírita del Brasil, en las reuniones de la USE: “Lo poco ya es mejor que la nada”.

En todos estos años de su participación en el movimiento espírita en Matão, ¿qué hecho considera usted como el más sobresaliente?

Muchos fueron los hechos que nos marcaron, pero destaco los homenajes que se le hicieron a Cairbar Schutel en el centenario del municipio de Matão, el 29 y 30 de agosto de 1998, con la presencia de líderes espíritas de todo el Estado de São Paulo, en un evento organizado por la Unión de Sociedades Espíritas del Estado de São Paulo. Ese respeto que el movimiento espírita tiene por Cairbar Schutel es muy interesante, puesto que en todos los lugares a los que vamos y citamos a Matão, inmediatamente viene el recuerdo del Embanderado del Espiritismo. Toda iniciativa que rescate estas figuras del Espiritismo es loable y merece nuestro respeto.

Háblenos de su experiencia de coordinar con los conferencistas en el Centro Espírita O Clarim y en el Centro Espírita Allan Kardec.

Es un trabajo muy placentero porque proporciona dos posibilidades: conocer  conferencistas de otras ciudades, de otros Estados, y al mismo tiempo adquirir conocimientos. Hoy tenemos condiciones de ofrecer oportunidades a los trabajadores de la casa, en el sentido de desarrollar las conferencias, así como actuar con oradores conocidos y con una vivencia mayor en la Doctrina Espírita, que están dispuestos a colaborar con las Casas Espíritas. Al hacer esto, la intención no es tener la casa llena, lo que muchas veces ocurre  de acuerdo al nombre del conferencista, sino demostrar la grandeza de la Doctrina Espírita y, al mismo tiempo, motivar a los que se inician a prepararse mejor para la noble tarea de la divulgación.

¿Qué visión tiene de la actualidad del movimiento espírita en nuestro país? ¿Cuál sería, en su opinión, nuestra mayor necesidad?

Veo al movimiento espírita creciendo en cantidad y en calidad en los eventos. Son muchos los congresos, seminarios, simposios y encuentros donde la Doctrina Espírita es discutida de manera amplia. Eso está muy bien; sin embargo pienso que esas discusiones requieren ser  compartidas con aquellos que no tienen la posibilidad de participar de esos eventos, por varios motivos. Aquellos que asisten necesitan reproducir esos trabajos en sus casas de origen para que la “candela no quede debajo del celemín”. En mi opinión, esa es una necesidad, es decir, colocar la luz al alcance de todos.

Como conferencista, ¿cómo ha sentido usted al público y a las instituciones que ha visitado? ¿Qué impresiones guarda de esos contactos?

Siento un público cada vez más atento en las conferencias y con un retorno muy positivo en relación a los temas abordados. Las instituciones se han esforzado en el sentido de ofrecer las mejores condiciones a los conferencistas para que el mensaje logre sus objetivos, con recursos audiovisuales, sonido de calidad, etc. En mi opinión, las personas ya no frecuentan  las conferencias sólo por los pases sino para buscar informaciones que las ayuden a enfrentar las dificultades del día a día con más tranquilidad.

¿Algo más que le gustaría agregar?

El movimiento espírita, como dijimos, es hecho por idealistas. No vamos a dejar que este ideal se enfríe por las dificultades, y ante las posibles diferencias existentes entre los trabajadores, juntémonos en los puntos en común y respetémonos en las diferencias.



 


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Revista Semanal de Divulgación Espirita