Especial

por Juan Carlos Orozco

María de Nazaret: madre intercesora junto a Jesús

Este tema me vino a la mente después de oír de un religioso la afirmación de que María de Nazarét sería intercesora junto a Jesús. Esa cuestión me despertó el interés por estudiar la vida de la madre de Jesús, considerando las diferentes fuentes de consulta para la construcción de una investigación de como sería esa afirmación bajo la óptica espírita.

En esa dirección, el pasaje bíblico que más caracteriza a María como intercesora es las Bodas de Canaán, en que la Madre va a su Hijo amado pidiendo para dar solución a una situación difícil, pues ella sabía que el Maestro podría resolver aquella cuestión. De ese pasaje, surge el título de Madre intercesora.

Nada mejor que comenzar por las Bodas de Canaán:

“Y, al tercer día, se hicieron unas bodas en Canaán de Galilea; y estaba allí la madre de Jesús. Y fue también invitado Jesús y sus discípulos para las bodas. Y, faltando vino, la madre de Jesús le dijo: no tienen vino. Le dice Jesús: Mujer, ¿qué tengo yo contigo? (¿o qué quieres de mí, mujer?) Aun no es llegada mi hora. Su madre dice a los sirvientes: haced todo cuanto él os dijera. Y estaban allí puestas seis tallas de piedra, para las purificaciones de los judíos, y en cada uno cabían dos o tres medidas. Les dice Jesús: llena de agua esas tallas. Y la llenaron hasta arriba. Y les dijo: tirad ahora, y llevad al maestro de sala. Y lo llevaron. Y, luego que el maestro de sala probó el agua hecha vino (no sabiendo de donde vino, si bien que lo sabían los sirvientes que habían tirado el agua), llamó el maestro al esposo, y le dijo: todo hombre pone primero el vino bueno y, cuando ya han bebido bien, entonces el inferior; más tu guardaste hasta ahora el buen vino. Jesús empezó así sus señales en Canaán de Galilea, y manifestó su gloria; y sus discípulos creyeron en él. Después de esto descendió a Cafarnaun, él, y su madre, y sus hermanos, y sus discípulos; y quedaron allí no muchos días”. (Juan 2: 1-12)

Las Bodas de Canaán dieron lugar al primer milagro de Jesús o fenómeno natural según la ley de Dios. Con todo, aquel no era el momento de el Hijo de Dios revelar su poder, pues sabía que sería el inicio de su misión en el plano de Dios hasta la pasión en la cruz.

La preocupación de Jesús con la hora fijada por Deus para su glorificación significaba derramar él su sangre en nombre de una eterna Alianza, la misma sangre simbolizada por el vino compartido con sus apostoles en la última Cena, antes de su muerte, pues el Maestro asociaba aquel momento al día de su crucifixión.

En Canaán, María percibe que el vino estaba acabando, lo que podría molestar a los novios, pues faltaría lo principal para la fiesta, el vino, que simbolizaba la alegría e abundancia.

María dirige a Jesús: Ellos no tienen más vino”, porque en su corazón sabia que su hijo podía ayudar. La respuesta de Jesús fue: “¿Qué quieres de mí, mujer? Mi hora aun no llegó”.

Las palabras de Jesús no hicieron a María desistir. Jesús la amaba. La intercesión de María convenció a Jesús para hacer aquello que ella pedía. El primer milagro de Jesús ocurrió por la fe de la Madre en su divino Hijo.

Al hacer que el hijo cambiase de idea, María conquistó un lugar en el corazón de los cristianos, como intercesora, aquella que puede pedir a Jesús que atienda a los deseos de las personas.

Al respecto de María como abogada e intercesora junto a Jesús, destacamos del libro “Universo y Vida”, del Espíritu Áureo:

Jesús dice a la esposa de Zebedeo que solo se sentarían a su derecha y a su izquierda, en el reino de los Cielos, aquellos a quien el Padre había reservado esos lugares, porque sabía que el Eterno ya eligió para esos supremos ministerios al gran Bautista y la magnánima María de Nazarét; el primero para regir, bajo su crística supervisión, los problemas planetarios de la Justicia, y ella para supervisar, bajo su soberana influencia, las benevolencias del amor. Por eso, todos los decretos labrados por el sublime Canciller de la Justicia solamente son homologados por el Cristo después de examinados e instruidos por la excelsa Abogada de la humanidad, a fin de que nunca falte, en cualquier proceso de dolor, las bendiciones compasivas de la misericordia y de la esperanza”. (Áureo, en Universo y Vida.)

Estrella divina del universo de las grandes Almas, también ella tuvo que peregrinar del paraíso excelso de su felicidad para nuestro valle de lágrimas, a fin de ayudar y servir a una humanidad paupérrima de espiritualidad, de la cual se hizo, para siempre, la gran Madre, la gran Abogada y la gran Protectora”. (Áureo, en Universo y Vida.)

En cuanto a hacer todo lo que Jesús nos orienta, en el libro “Camino, verdad y vida”, del Espíritu Emmanuel, en la psicografia de Francisco Cândido Xavier, en la lección 171 - Palabras de Madre, tenemos:

Su madre dice a los sirvientes: haced todo cuanto él os dijera.” - (JUAN, capítulo 2, versículo 5.)

(...) Tenemos igualmente, en el Documento Sagrado, reminiscencias de María. Examinemos sus preciosas palabras en Canaán, llenas de sabiduría y amor materno.

Generalmente, cuando los hijos procuran la cariñosa intervención de madre es que se sienten huérfanos de ánimo o necesitados de alegría. Por eso mismo, en todos los lugares del mundo, es común observar a hijos discutiendo con los padres y llorando ante corazones maternos.

Interpretada con justicia por un ángel tutelar del Cristianismo, a veces es con inmensas aflicciones que recurrimos a María. (...)

En muchas ocasiones, se agota el vino de la esperanza. Nos sentimos extenuados, desilusionados... Imploramos ternura maternal y he que María nos responde: haced todo cuanto él os dijera. El consejo es sabio y profundo y fue colocado al principio de los trabajos de salvación. Escuchando semejante advertencia de Madre, meditemos si realmente estaremos haciendo todo cuanto el Maestro nos dice”. (EMMANUEL. Camino, Verdad y Vida)

En el libro “Memorias de un Suicida”, Yvonne do Amaral Pereira relata las experiencias del Espíritu Camilo Cândido Botelho después de cometer un acto atentando contra su propia vida y, por consiguiente, el nuevo amanecer en el mundo espiritual.

Camilo revela que María de Nazarét dirige en el plano Espiritual varias organizaciones de socorro a los necesitados, de entre ellos el Hospital María de Nazarét y la Mansión de la Esperanza. En esas instituciones, bajo la influencia y las orientaciones de María madre de Jesús, se prestan socorro, por intermedio de la Legión de los Siervos de María, aquellos que abreviaron voluntariamente  su vida y por eso padecen atroces dolores en el mundo espiritual.

En el Capítulo 9, “Los archivos del alma”, Camilo narra que “los avisos y las órdenes vienen de lo Más Alto... de allá, donde estaciona la asistencia magnánima de la piadosa Madre de la Humanidad, la Gobernadora de nuestra Legión (...) si a otro eminente Espíritu fuera dirigida la suplica, será esta encaminada a María y se seguirán las mismas providencias, pues, como vimos afirmando, es María la sublime acogedora de los réprobos que se arrojaron a los temerosos abismos de la muerte voluntaria...” 

Más adelante, Camilo cuenta acerca del posible encaminamiento de un Espíritu obsesor a los canales competentes para una reencarnación expiatoria en un planeta inferior a la Tierra para quitar sus débitos. Con todo, Camilo narra que tal medida drástica repugnaría a la caridad y que se debería agotar todos los recursos lógicos y legales para persuadir al arrepentimiento y a la regeneración, sirviéndose de la gran ternura y piedad.

Enseguida dice: “María intercedió por este infeliz, junto a su divino Hijo, en cuanto a nosotros otros recomendó la máxima paciencia, la más fecunda expresión de caridad y de amor de que fuimos capaces, ¡a fin de ser aplicados en su lamentable  caso! Así es que, prisionero aun, como lo veis, recibe sin interrupción toda la asistencia moral, espiritual y hasta ‘física’, si así me puedo expresar, que su natureza animalizada y grosera requiere”.

En el Capítulo 11, en “Otra vez Jerónimo y familia”, Camilo discurre sobre el emocionante momento del Ângelus, de saludo a María que es fielmente respetado por sus legionarios en la Colonia Espiritual. En la ocasión solemne de la oración, dice: “Oré, esta vez, como nunca jamás había orado. ¡Supliqué  a la amorosa madre de nuestro Redentor asistencia y misericordia para mis filhos! ¡Que intercediesen junto a Jesús nuestro Señor, en el sentido de beneficiar a los infelices niños por mí abandonados a los inclementes embates de la adversidad!”

Por todas estas narraciones de la literatura Espírita, verificamos la autoridad de María de Nazarét para interceder por nosotros junto a su hijo Jesús, principalmente en los momentos de grandes dificultades por medio de nuestras suplicas, oraciones que deben ser realizadas del fondo del corazón, con mucha fe y voluntad, pues lo que se pide obtiene, lo que se busca encuentra, en la puerta que se llama ella será abierta.

 

Bibliografia:

ALVAREZ, Rodrigo. María: la biografia de la mujer que generó al hombre más importante de la historia, vivió un infierno, dividió a los cristianos, conquistó medio mundo y es llamada Madre de Dios. 1ª Edição. São Paulo: Editora Globo S. A., 2015.

AUREO (Espírito); (psicografado por) Hernani Trindade Sant’Anna. Universo e Vida. 9ª Edição. Brasília/DF: Federação Espírita Brasileira, 2016.

BÍBLIA SAGRADA.

BOTELHO, Camilo Cândido (Espírito); (psicografado por) Yvonne A. Pereira. Memórias de um suicida. 27ª Edição. Brasília/DF: Federação Espírita Brasileira, 2016.

CAMPOS, Humberto de (Espírito); (psicografado por) Francisco Cândido Xavier. Boa Nova. 37ª Edição. Brasília/DF: Federação Espírita Brasileira, 2016.

EMMANUEL (Espírito); (psicografado por) Francisco Cândido Xavier. A Caminho da Luz. 38ª Edição. Brasília/DF: Federação Espírita Brasileira, 2016.

EMMANUEL (Espírito); (psicografado por) Francisco Cândido Xavier. Caminho, Verdade e Vida. 1ª Edição. Brasília/DF: Federação Espírita Brasileira, (1948).

MIRAMEZ (Espírito); (psicografado por) João Nunes Maia. Maria de Nazaré. 12ª Edição. Belo Horizonte/MG: Fonte Viva, 2011.

XAVIER, Francisco Cândido (psicografado por); PEREIRA, Yvonne do Amaral (psicografado por); CARNEIRO, Edison (organizado por). Maria, Mãe de Jesus. 2ª Edição. São Paulo: Editora Aliança, 2011.

 

Traducción:
Isabel Porras
isabelporras1@gmail.com

 
 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita