Entrevista

por Orson Peter Carrara

Stela Onishi nos habla sobre Cachorrito perdido, 
su primer libro infantil

Nacida en São Paulo, capital, y actualmente residente en São José do Rio Preto, en el interior paulista, Stela Fernandes Onishi (foto) es espíirita desde niña. Pedagoga, escritora, esposa de  Oceander Veschi- dedicado divulgador espírita en la ciudad y la región-, madre de Lara (10 años) y Lívia (2 años), y cuidando de sus padres que residen con ella desde el 2016, está vinculada a  la Asociación Espírita A Caminho da Luz, de su ciudad, donde trabaja como  evangelizadora de la juventud, integrando también el grupo de conferencistas que se turnan en esa casa, además de trabajar en otras instituciones de la región.

Dedicada a la literatura, recientemente lanzó su primer libro infantil, Cachorrito Perdido, publicado por la Editorial IDE (Instituto de Difusión Espírita), tema central de la siguiente entrevista.

¿Cómo y cuándo se volvió espírita?

Desde niña acompañé a mi madre al centro, pero el despertar del deseo de estudiar la Doctrina solo se dio alrededor de los 21 años, cuando residí en Japón.

¿Cómo surgió su interés por la literatura infantil?

Mi primera hija nació en el 2008, pienso que con ella nació también mi creatividad en esa área. Producía libros caseros que eran bien aceptados por ella, aunque ello no bastó para que yo considerase la idea de ser escritora.

¿Cómo, entonces, surgió el libro Cachorrito Perdido?

El libro fue producido sin pretensiones, más como algo doméstico que tuve la feliz idea de presentar a una amiga formada en Letras con Maestría en Literatura (Denise Fraga), que en una época fue mi profesora en la facultad (Unilago), y ella me alentó a escribir para el público en general, aunque no lo mostré a nadie más, hasta que en una visita a mi casa, le comenté a Orson Peter Carrara sobre mis libros y él me incentivó a mostrárselos a la IDE. Y así nacía la historia mas allá de mi hogar.

En el contenido de la obra, ¿cómo se dirige a los niños?

En el contenido tengo la preocupación de tocar los sentimientos del niño, finalmente la Literatura no es un texto informativo, y tengo el cuidado de tener un final feliz, que genera buen ánimo en los pequeños.

Y como madre, ¿cuál es la conexión con la obra?

Como madre, no contextualizo el contenido, me gusta ver las reacciones de cada página en los ojos de ellas y sólo si hubiera alguna mala interpretación es que entro con la verdadera moral, de lo contrario dejo a los niños a su gusto.

¿Tiene otras obras en proceso?

Creo que este año tendremos un libro infantil más, y otro dirigido al público en general (centrándose en nuestros adolescentes).

Háblenos de las ilustraciones.

Las ilustraciones de este trabajo me hacen reír, porque creo que hoy diseño un poco mejor. Una vez hice un curso para mejorar mis trazos, pero una amiga dijo que mis dibujos tenían mi identidad, así que seguí dibujando como mi hija me dice, "igual que una niña".

De esas experiencias, ¿cuál es la más significativa?

Estas experiencias tienen una mezcla de muchas cosas buenas, realizaciones, amistades involucradas, fe y perseverancia.

¿Algo mas que le gustaría añadir?

Algunas curiosidades que relato a continuación:

Un día conversando con el dirigente de nuestra casa espirita (el profesor Rodrigues Ferreira), un maestro y amigo para mí, le conté que tenía este “talento” de escribir para los niños, pero que no lo tomaría en serio porque no rendiría mucho financieramente; entonces él me dio una lección que mi espíritu inmaduro llevó a la eternidad.

Me dijo: "Stela, eso no es tuyo, es para el mundo. Y a veces no te rendirá nada en absoluto. No tienes derecho de encarpetarlo."

Fue un despertar en el que vi mi materialismo y egoísmo creando barreras que teníamos que romper, y entonces empecé a dedicarme, sentí la importancia de la responsabilidad, y todo fue sucediendo.

Sus palabras finales.

Hoy me despierto todos los días a las 5:00 de la mañana y escribo como voluntaria del mundo. Aunque no pase nada, descubrí que tengo el deber que cumplir, y un deber muy placentero, digámoslo de paso; luego, cuando son las 6:30 a.m., es hora de despertar a Stela la esposa, madre, hija, amiga, con todos los deberes que competen en cada función.

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita