Entrevista

por Angélica Alves de Araujo

Siempre habrá nuevas situaciones para el crecimiento del espíritu

La frase de arriba está presente en la entrevista que el colega César Augusto Félix Crispiniano, también conocido en el medio espírita como César Crispim (foto), nos concedió. Nacido en febrero de 1971, en el estado de Piauí, se graduó en Administración de Empresas y en Letras (inglés) y postgrado en Publicidad, Propaganda y Marketing. Espírita desde 1993, César desarrolla actividades en casas espiritas en los estados de Piauí y Maranhão, además de psicografiar libros por medio de su mediumnidad y dictar conferencias. Uno de esos libros es Confesiones de sabiduría y amor, de autoría de Marie Sophie (autora espiritual), tema de la entrevista a continuación.

¿Cuál es la principal motivación para escribir Confesiones de sabiduría y amor?

Revelar historias de personajes anónimos para la humanidad, pero que existieron y fueron importantes, por sus acciones en el bien, en determinada época. Mostrar sus implicaciones con otros seres que trajeron a la Tierra nuevos conceptos y ejemplos de vida, fundamentales para el crecimiento espiritual, despertando en lo íntimo nuevas energías y haciendo vibrar las emociones del Planeta. Promover lo nuevo que nos lleva a actuar de manera diferente, elevando el alma a niveles desconocidos, siempre saludables.

¿Qué encontrará el lector en esta novela? Háganos una reseña del libro.

El libro está prácticamente conducido sólo por personajes femeninos. En la primera parte, los personajes Lídia y Astrid se encuentran con el amor y la guerra, y en esta lucha vence el poder de la materia y una vez más el amor es derrotado. Arthur y Átimus, sus enamorados, participan en la guerra entre galos y romanos, y mueren tras la derrota, dejándolos con la esperanza de un reencuentro futuro. En la segunda parte, Vitória vive la esperanza de un verdadero amor, y encuentra a Roberto. Es el pasado que vuelve. Hay muchos momentos de alegría y tranquilidad, para culminar en la tercera parte, cuando Roberto va a la guerra de las cruzadas, y desencarna allí. Sólo en la cuarta parte el amor vence, y Celeste (que fue Lydia y Victoria), al desencarnar también, se encuentra en el plano astral con Roberto (que fue Arthur). Es cuando la serenidad y la paz demuestran una vez más que son importantes para lograr un mundo mejor.

Confesiones de sabiduría y amor presenta la confesión de cuatro personajes en su jornada evolutiva. Y todas estas confesiones se unen por la reencarnación. ¿Podemos afirmar que somos una acumulación de las diversas personalidades que hemos tenido en vidas pasadas?

Hoy somos el resultado. Como un río, del que sólo vemos la parte y profundidad en la que nos bañamos todos los días. Siendo que todo el resto del río, que es desconocido para nosotros, es lo que ya vivimos, pero en este momento es extraño; sin embargo, sigue con nosotros. No hay manera de separar las porciones, ni siquiera dejar en el pasado o seccionar el futuro: es todo un manantial de agua que sigue y avanza junto, y que un día llegará al mar, lugar donde todos se reunirán.

¿No existe un límite para la reencarnación?

Siguiendo la analogía del río, el espíritu avanza en su evolución pasando por diversas experiencias que le aportan nuevos aprendizajes. Como un río que pasa a través de varias ciudades, Estados, regiones, donándose, alimentando al prójimo con lo que existe en su profundidad, recibiendo de los habitantes, reflejando la luz del sol o la luna que sobre sus aguas se proyectan. A veces rudo, bravo, incómodo; en otros momentos, tranquilo, sereno, amable. Atraviesa montañas, piedras, valles, para al final alcanzar el mar, y allí, juntarse a todos los otros ríos, y ya no necesitan recorrer caminos, porque ha alcanzado la perfección. La reencarnación es necesaria en la medida que surge la necesidad de que el espíritu aprenda, evolucione. Alcanzando el estado de la perfección absoluta, que sólo sucede en mundos más avanzados que el nuestro, Dichosos y Felices, no habrá necesidad de la reencarnación.  

El libro también aborda temas mediúmnicos; háblenos un poco de eso.

Hoy escuchamos mucho sobre el desdoblamiento espiritual, que es la experiencia fuera del cuerpo, que Kardec trata, entre otros fenómenos, de la Bicorporeidad. En la tercera parte del libro, este fenómeno se vuelve muy claro, lo que facilita al lector entender cómo se da. También relata experiencias similares de viajes astrales realizados por varios personajes, centrándose más precisamente en esa posibilidad de que, durante el sueño, estemos con nuestros mentores, amigos, desconocidos para aprender nuevos conocimientos o para el desarrollo de actividades. Revelando que mucho de lo que vivimos en el mundo material comenzó en el mundo espiritual.

¿Qué dice del argumento de que la reencarnación desalienta las acciones de renovación en el presente, porque siempre tendremos otra oportunidad?

La novela nos muestra la felicidad de aprovechar los momentos de la vida, y recuerda que las oportunidades no se repiten. El ser nunca se baña en el mismo río dos veces porque, aunque está en el mismo lugar, las aguas serán otras y el ser también habrá cambiado. La transformación y la evolución no se dan de encarnación en encarnación, sino de segundo a segundo dentro de la misma encarnación. No debemos pensar que no es necesario esforzarse en esta existencia, ya que tendremos que vivir otras, porque cada oportunidad es una siembra y la cosecha tendrá lugar en el futuro. Ahora, el futuro depende del esfuerzo de hoy. Cuando se produce una Progresión de la Memoria natural, podemos ver cuán importante es trabajar en la reencarnación actual. La Progresión de la Memoria no pretende revelar el futuro, sino decirle al ser que él cosecha  lo que siembra, y que todo puede ser diferente, si hay esfuerzo y dedicación en el bien. 

Si no recordamos nuestras otras vidas, ¿qué traemos de ellas a la existencia actual?

No existen otras vidas; solo hay una única vida, que es la vida eterna. El espíritu en su trayectoria evolutiva sigue un camino y para alcanzar su mayor grado de evolución debe estar en diferentes lugares en busca de nuevas experiencias. El espíritu es valiente y, al vivir diferentes oportunidades en busca del conocimiento, registra en su memoria astral, en el periespíritu, lo que es importante; nada le es desconocido y todo queda registrado en él. Las acciones, los sentimientos, las emociones son parte del ser, lo impulsan y lo dirigen. Y todo ese caudal de actitudes parte de las informaciones pasadas que forman parte de él. Debemos pensar en el espíritu como un todo, no en partes, cuando las situaciones y experiencias experimentadas se tratan como vidas separadas. Es importante tener una visión holística de la vida y percibir que el todo está en el ser, y cada experiencia del ser está en su todo.

¿Cómo podemos afirmar, por el Espiritismo, que la misericordia divina es parte del proceso reencarnatorio?

La novela cuenta cuatro historias tan interconectadas entre sí que se hace imposible despreciar la realidad de la misericordia divina, ya que es la secuencia, la continuidad de las acciones que nos lleva a construir lo que realmente somos. Por lo general, el tema de la reencarnación es tratado como el rescate de los errores cometidos, pero la propuesta divina va mucho más allá. También es una oportunidad para el aprendizaje, los intercambios, la construcción colectiva, que va sucediendo a lo largo de los siglos. La misericordia divina se da más específicamente en la unión de todos para la edificación de muchas moradas, siendo éstas la unidad de cada ser. El eje es el espíritu, su caminata, su crecimiento; no es la materia y que ésta pueda proporcionar. Pensando así, se puede percibir lo importante que es saber que los cambios dependen de nosotros y que las existencias son campos de lucha abiertos para que todos crezcan, aprendan, evolucionen. Dios es toda esta oportunidad de ser mejor, de evolucionar... Y eso es divino.

¿Es posible disminuir el número de las reencarnaciones? ¿Cómo?

El número de las encarnaciones no está definido, no sabemos si estamos aumentando o disminuyéndolos. Pero es verdad que el trabajo, el estudio, la contemplación de lo bello, las vivencias de momentos sublimes alteran el orden de los hechos. Existe algo que viene del pasado, pero también existe algo que viene del futuro. No es solamente el pasado lo que conduce el presente, sino el futuro también nos está pidiendo un cambio de acciones para que éste sea mejor. Kardec dice que el ser se puede quedar estacionado por algún tiempo, pero en otros momentos evoluciona siempre, nunca retrocede. Eso nos lleva a creer que nuestra vida (pasado, presente y futuro) se proyecta para elaborar las encarnaciones. Poco importa la cantidad, y sí lo que hacemos en cada una de ellas. En mundos más evolucionados las encarnaciones son diferentes, son mejores, realmente más placenteras; tal vez allí sea bueno tener muchas encarnaciones.

La reparación de una falta, ¿puede ser obligatoria o es indispensable el arrepentimiento?

Nuevamente caemos en la misma preocupación, la reparación de las faltas, y eso no es lo que más importa. Estamos aquí para adquirir más experiencias, para ser felices, aunque sea por instantes; para buscar la victoria del ser sobre sus propios vicios. Para volverse ángeles. Una reparación puede ser obligatoria porque el espíritu actuó de manera que necesite que así sea, lo que termina siendo una decisión de él. El arrepentimiento solo es necesario cuando el espíritu entiende que debe ser así, porque Dios sabe hasta dónde un espíritu puede llegar en determinado error, pero sabe que él puede recorrer nuevos caminos, y la búsqueda de nuevos caminos es lo que llamamos “arrepentimiento”; entonces se vuelve importante.

¿Cómo conciliar la reencarnación obligatoria y el libre albedrio?

Como mencioné, si el espíritu actúa de tal forma, él necesitará de la reencarnación obligatoria, lo que termina siendo su elección. El libre albedrio es proporcional a la evolución del ser. Para los espíritus que comprendieron la importancia del respeto al prójimo, de la fraternidad, de la unión, del amor entre todos, la elección siempre será obviamente por el bien.

La evolución rápida o lenta depende de cada ser. ¿es posible que no todos puedan usar el libre albedrío de la misma manera?

Sí.

¿Qué desea transmitir el espíritu Marie Sophie a los lectores con Confesiones de sabiduría y amor?

Decirle a la humanidad que existen las guerras, pero que también existen las oportunidades para el amor. Que la vida es eterna. Que siempre habrá nuevas situaciones para el crecimiento del espíritu. Que el encuentro entre todos, en diferentes mundos, en diferentes niveles de evolución, es posible. Que formamos la familia universal de Dios, y que para todo hay una solución, siempre que exista la perseverancia en el bien y el esfuerzo para construir mejores situaciones a nuestro alrededor.

Durante la psicografía, ¿tuvo contacto con los personajes y el ambiente de la historia? ¿Algo le impresionó durante la preparación de esta novela?

Las escenas pasaron en mi mente como en una pantalla de cine. Los personajes se movían y, gradualmente, iba convirtiéndome en el dueño de la historia, capaz de ponerla en papel. Marie estuvo a mi lado todo el tiempo, principalmente para decirme en qué momento el mensaje me ayudaría a comprender mejor las diferentes situaciones de la vida, para ayudar en mi trayectoria evolutiva. Y yo espero que esto también les ocurra a los lectores del libro.

¿Qué mensaje final dejaría a nuestros lectores?

Dios está en nuestra oportunidad de crecer, de ser mejor cada día. Cada acto de amor, cada palabra de aliento, cada momento de escuchar es un contacto con el dios que somos, un dios con “d” minúscula, pero siempre un dios que busca ser mejor, que se preocupa por el próximo y avanza. Entonces nunca perdamos la oportunidad de una buena lectura, de adquirir más conocimiento y más amor. Vivamos  la vida como si fuera un tiempo singular para llegar al mar, pues este río que somos llegará allá, para ser tan grande y poder amar a todos los que habitan las tierras firmes, que son los 7 billones de habitantes del planeta Tierra.

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita