Entrevista

por José Lucas

El Sermón de la Montaña enseña lo que es necesario para cambiar el mundo

La frase de arriba pertenece a la doctora Maria Paula Silva (foto), médica, con trabajos en una Unidad de Cuidados Paliativos Oncológicos, muy conocida por tu desempeño en el medio espírita, especialmente en Portugal.

En las lides espírita, además de conferencista, participa en las actividades de la Asociación Espírita Fernando Lacerda, en la región de Oporto, así como en la Asociación Médica Espírita del Norte, Portugal.

En esta entrevista, nos habla, entre otros temas, sobre el suicidio, el aborto, la divulgación espírita y su iniciación en el Espiritismo.

¿Cómo entró en su vida el Espiritismo?

El Espiritismo entró en mi vida hace casi 21 años. Sé con precisión la fecha porque llegué por dolor, dolor de madre que logró vencer barreras y mover montañas. Mirando hacia atrás veo claramente que muchos ya habían sido los llamados, pero solo ese dolor quebró mi orgullo pseudocientífico permitiéndome encontrar “El Camino”.

¿El Espiritismo cambió su vida?

Mucho. Hasta que conocí el Espiritismo, me guiaba por el paradigma materialista y exigía pruebas a quien afirmase que creía en la vida más allá de la muerte, refutando que no existía comprobación científica de ello. Cuando acepté, por insistencia de mi padre, ir a un Centro Espírita en búsqueda de ayuda para mi hija, fui porque haría cualquier cosa por ella y no tuve el coraje de cerrar esa puerta. Pero después de haber sido atendido por un señor de edad avanzada y muy humilde, me sentí envuelta en una emoción nunca antes experimentada y fue como si de repente todo estuviera iluminado por una luz intensa que me permitió ver lo que siempre estaba presente en mi vida, pero encubierto por la oscura noche del orgullo. A partir de ese día ya no paré de leer ni de estudiar las obras espiritas y de asistir y colaborar en diferentes actividades.

Antes de esa asistencia que marcó el inicio del cambio de mi vida, estaba dominada por la ansiedad cercana al pánico y por el miedo a la muerte, lo cual tenía un importante reflejo negativo en mi vida ya sea personal o profesional. Con el conocimiento progresivo de la Doctrina Espírita fui calmándome interiormente y venciendo ese miedo, acabando por dedicarme a los cuidados paliativos.

La dedicación a esta área de la Medicina hace que conviva muy cerca con la muerte, pero ahora con la certeza de que ésta se limita al cuerpo físico y no al espíritu, que lo sobrevive y que mantiene su identidad.

Hoy, aún en el comienzo de mi proceso de reforma íntima, reconozco que soy una persona diferente.  Los problemas continúan surgiendo porque son parte de la vida, pero la mirada sobre ellos ha adquirido una dimensión más amplia y siempre envuelta en la esperanza, que los relativiza, suavizando todos los dolores.

Agradezco a Jesús todos los días de mi vida por esta bendición que he tenido la oportunidad de transmitir a mis hijas, sabiendo que será el legado más importante que les puedo dejar.

¿Cómo podríamos divulgar más y mejor la Doctrina Espírita?

La doctrina espírita es desde hace tiempo, ampliamente divulgada y de las más variadas formas. Toda esta cultura de divulgación quedó bien ejemplificada por Allan Kardec en su esfuerzo colosal no sólo por haber publicado las obras básicas, sino también por haber mantenido la publicación mensual de la Revista Espírita. Desde entonces muchos han sido las publicaciones de obras complementarias de calidad in igual, de revistas y periódicos. Con el desarrollo de la tecnología aumentó la divulgación por los medios de comunicación, con conferencias en vídeo, con programas de televisión, teniendo estos como hito inicial el inolvidable Pinga-Fogo. La divulgación llegó al cine con la producción de películas de gran impacto e incluso con telenovelas.   

El vínculo de la Doctrina Espírita con la ciencia actual comienza a ser una realidad cada vez más patente con estudios publicados en revistas científicas. Entonces surge la pregunta: ¿será que es por falta de divulgación que la Doctrina Espírita no se difunde más? La pregunta central no parece centrarse en la cantidad, sino en la calidad. Encontrar un equilibrio entre cantidad y calidad sigue siendo un ejercicio difícil para el ser humano. Sin embargo, sabemos que va a mejorar inevitablemente frente a la ley de la evolución, comenzando con el esfuerzo constante de cada uno. Esta mirada desde dentro hacia afuera nos ayuda a no correr el riesgo de centrarnos en las dificultades externas, cualesquiera que sean, que nos ponen en el camino cómodo del no cambio.

En la localidad donde vive, ¿cómo se podría disminuir el suicidio y el aborto, concretamente, con la ayuda del Espiritismo?

¡Por la divulgación del Espiritismo mismo! La conciencia de la inmortalidad del alma, el conocimiento de la ley de causa y efecto y de la reencarnación, permite percibir la inutilidad del suicidio como una forma de dejar de existir para dejar de sufrir y también permite percibir la responsabilidad de que no se permita reencarnar a un espíritu. La forma de la divulgación puede cambiar según la necesidad y el momento, pero el contenido del mensaje permanecerá constante y basado en los postulados espíritas.

En particular en nuestra actividad, como Asociación Médico Espírita, reconocemos la responsabilidad de trabajar estos temas y asumir una postura pública y clara como profesionales del área de la salud.

Un aspecto que a menudo se olvida al abordar el tema del aborto y el suicidio es que muchos ya han pasado por la experiencia del aborto o el suicidio de un ser querido en esta reencarnación. Que nuestro discurso nunca aumente el dolor del remordimiento o de la angustia, sino que lleve el mensaje consolador de Jesús cuando afirmó que el amor cubre la multitud de pecados y recordar las palabras de Chico Xavier cuando afirmó que, aunque nadie puede volver atrás y hacer un nuevo comienzo, cualquiera puede empezar de nuevo y hacer una nuevo final.

¿Existe algún caso que haya vivenciado que haya demostrado la inmortalidad del Espíritu?

Sí, muchos. Pero elijo destacar las vivencias más presentes en mi día a día, porque en el contacto con pacientes terminales es frecuente el relato de visiones que son conocidas por la denominación "visiones en el lecho de muerte". Relato uno que fue especialmente significativo – la de una joven con poco más de 20 años que estaba internada para cuidados terminales debido a un tumor cerebral. Se encontraba en coma profundo hacía más de tres semanas, cuando, un domingo por la mañana, después de que la enfermera y la auxiliar de enfermería la bañaron en la cama y le dieron todos los demás cuidados, ella inesperadamente salió del coma, abrió los ojos, buscó con la mirada a su madre que también estaba en la habitación y le dijo: "mamá, mi hermano ha venido a recogerme. ¡Voy a partir!" Cerró los ojos y dio su último suspiro. Ese domingo se cumplían seis años de la partida de su hermano, víctima de un accidente de trabajo.

Éste es uno de los innumerables casos que llenan nuestra vida coticiana y que constituyen una de las evidencias que demuestran la supervivencia del alma.

Desde su punto de vista ¿por qué la Doctrina Espírita y Allan Kardec son prácticamente ignorados en Francia y en Europa en general?

Por el orgullo del viejo continente. Mucho se ha explorado sobre esta cuestión, pero lo más importante es haber nacido en el lugar correcto, porque allí, sí, no fue decisión del hombre y era importante haber nacido en el continente europeo por su papel histórico y cultural. Entonces, haber caído en la ignorancia, ya tuvo la interferencia del libre albedrío del hombre. Pero independientemente del lugar donde nació el Espiritismo, éste creció y se va difundinedo gradualmente llevando su mensaje consolador.

¿Cómo se podría revertir esa situación?

El mundo sufre cambios constantes y el tiempo es un aliado fundamental. En Europa ya no se vive el paradigma materialista. Hoy, además, está "de moda" ser espiritualista, pero todavía siente un fuerte estigma en relación al Espiritismo.

La puerta de (re) entrada del Espiritismo en Europa está muy relacionada con la vertiente científica y eso es lo que ya está sucediendo. El trabajo iniciado por la Dra. Marlene Nobre en Europa tuvo y tiene un papel importante en este recorrido. Cada año, médicos y psicólogos por invitación de la Asociación Médica Espírita Internacional llegan a Europa, recorriendo varios países, en un proceso de divulgación del Espiritismo aliado a la ciencia. De este movimiento han nacido Asociaciones Médico Espíritas ya en varios países europeos, contribuyendo así al crecimiento de este movimiento. En realidad, el camino se hace caminando, y estamos caminando lentamente, pero siempre.

¿Qué le diría a los gobernantes del mundo si pudiera hablarles sobre el Espiritismo?

Usando los esclarecimientos traídos por el Espiritismo, "solo" les hablaría sobre el Sermón de la Montaña, porque contiene todo lo que necesitamos saber para que cambiemos y para cambiar el mundo.

 
Traducción:
Ricardo Morante
rmorante3@yahoo.com

 

     
     

O Consolador
 Revista Semanal de Divulgação Espírita