Estudio de las Obras de Allan Kardec

por Astolfo O. de Oliveira Filho

 
La Revista Espírita de 1862

Parte 13

Continuamos el estudio de la Revue Spirite correspondiente al año 1862. El texto condensado del volumen citado será presentado aquí en 16 partes, tomando como base la traducción de Júlio Abreu Filho publicada por EDICEL.


Preguntas para el debate


A. ¿Qué dijo el Espíritu de Galileo sobre Dios?

B. ¿Cómo consideraba San Agustín el estudio y su importancia?

C. ¿Quién fue Apolonio de Tiana?


Texto para la lectura


135. Invitado a visitar los grupos de Lyon y Burdeos, Kardec dice que acepta la invitación con placer. (PP. 273 a 275)

136. A los espíritas de Burdeos, Kardec les pide que no haya banquete porque irá allí en carácter pastoral y prefiere que se le dé una acogida más sencilla, de acuerdo con sus hábitos y sus principios. (PP. 275 y 276)

137. “Peregrinaciones del alma” y “El Ángel de la Guarda” son los títulos de los poemas transmitidos por B. Joly y Dulcis, este último durante una sesión de la Sociedad Espírita Africana. (PP. 277 a 279)

138. Galileo, valiéndose del Sr. Camille Flammarion como médium, transmitió tres comunicaciones reunidas bajo el título de “Estudios Uranográficos”. Kardec informa que las tres constituían la iniciación de un joven médium. (N.R.: Estas comunicaciones formarían, más adelante, el capítulo VI de “La Génesis”, última obra escrita por Kardec.) (PP. 280 a 283)

139. Estas son, a manera de resumen, algunas informaciones firmadas por Galileo: I – El primer principio, la causa primera es Dios: ante este nombre venerado todo se inclina y  el arpa etérea de los cielos hace vibrar sus cuerdas de oro. II – Dice el naturalista moderno: “La naturaleza es el trono exterior del poder divino”. A esa definición uniré esta: “La naturaleza es el poder efectivo del Creador”. III – El espacio es infinito y así lo digo porque es imposible oponerle cualquier límite. (PP. 280 a 382)

140. San Agustín dice, a propósito del período de vacaciones de la Sociedad Espírita de París, que para el espírita fervoroso no hay horas determinadas para el estudio, pues toda su vida no es más que una hora, y aún muy breve para el trabajo al que se dedica: el desarrollo intelectual de las criaturas humanas. (P. 283) 

141. En un aviso a los centros espíritas que visitaría, Kardec pide que preparen con anticipación las preguntas que él iría a responder, porque durante las reuniones muchos no saben qué preguntar o se callan por timidez o por la dificultad de formular su pensamiento. (P. 285)

142. Kardec escribe sobre Apolonio, de Tiana, ciudad griega de la Capadocia, en Asia Menor, donde él habría nacido dos o tres años antes de Jesús, y muerto a los 96 años. Hijo de uno de los más ricos ciudadanos de Tiana, Apolonio seguía los preceptos enseñados por Pitágoras y se le atribuye, entre otras cosas, el don de curar, la presciencia, la visión a distancia, el poder de leer el pensamiento, expulsar a los demonios y de transportarse súbitamente de un lugar a otro. (PP. 287 a 298)

143. Después de rememorar frases dichas por Apolonio de Tiana y algunos hechos de su vida, Kardec concluye el artículo afirmando que el gran filósofo sirvió de enlace entre el paganismo y el cristianismo y tal vez ésta haya sido su misión en nuestro mundo. (P. 298)

144. La Revue transcribe la noticia publicada en "Abeille Agénaise” del 25/5/1862, referente a un artículo titulado Conversaciones Espíritas, en el que el Sr. Cazenove de Pradine presenta un resumen del Espiritismo y lo clasifica como una doctrina perversa. El Sr. Dombre, de Marmande, escribió al referido periódico, refutando la crítica, pero su carta no fue publicada, bajo el alegato de que el periódico no podía propagar dichas ideas, a su modo de ver, esencialmente peligrosas. (PP. 298 a 301)

145. La Sociedad Espírita de París otorgó el título de miembro honorario al Sr. Dombre, de Marmande, y a otros cofrades que venían prestando notables y efectivos servicios a la causa del Espiritismo. Dombre aceptó, reconocido, el título que le fue otorgado, y Kardec le dedicó a continuación un merecido homenaje. (PP. 301 a 304) (Continúa en el próximo número.) 


Respuestas a las preguntas


A. ¿Qué dijo el Espíritu de Galileo sobre Dios?

Valiéndose del Sr. Camille Flammarion como médium, Galileo dijo que el primer principio, la causa primera es Dios y que ante este nombre venerado todo se inclina y  el arpa etérea de los cielos hace vibrar sus cuerdas de oro. (Revue Spirite de 1862, pp. 280 a 283.)

B. ¿Cómo consideraba San Agustín el estudio y su importancia?

San Agustín observó que para el espírita fervoroso no hay horas determinadas para el estudio, pues toda su vida no es más que una hora, y aun muy breve para el trabajo al que se dedica: el desarrollo intelectual de las criaturas humanas. (Obra citada, p. 283.)

C. ¿Quién fue Apolonio de Tiana?

Apolonio, de Tiana, ciudad griega de la Capadocia, en Asia Menor, habría nacido, según Kardec, dos o tres años antes de Jesús y muerto a los 96 años. Hijo de uno de los más ricos ciudadanos de Tiana, Apolonio seguía los preceptos enseñados por Pitágoras y se le atribuye, entre otras cosas, el don de curar, la presciencia, la visión a distancia, el poder de leer el pensamiento, expulsar a los demonios y de transportarse súbitamente de un lugar a otro. (Obra citada, pp. 287 a 298.)

 

Traducción:
Maria Reyna - mreyna.morante@gmail.com



 

     
     

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